Cromo y níquel en la superficie de espiga de metal puede protegerlos efectivamente de la corrosión y la oxidación. El siguiente es un desglose de cómo logran este efecto:
1. Forma una capa protectora
El revestimiento de cromo: el tratamiento con recubrimiento de cromo forma una capa delgada y dura de cromo en la superficie del metal, que puede bloquear el oxígeno, la humedad y otras sustancias corrosivas al contactar directamente el sustrato metálico. Por lo tanto, las superficies metálicas no se oxidan o corroen fácilmente.
El revestimiento de níquel: el níquel también forma una capa de níquel en la superficie del metal, que tiene una buena resistencia a la corrosión y puede proteger efectivamente el metal de la humedad y el oxígeno en el aire, evitando las reacciones de oxidación.
2. Mejorar la capacidad antioxidante
Prevención de reacciones de oxidación: cuando los metales (especialmente el hierro, el cobre, etc.) reaccionan con el oxígeno en el aire, producen óxidos (como óxido o verde de cobre), lo que no solo afectan la apariencia sino que también dañan la resistencia y la estructura del metal. Los tratamientos de cromo y níquel proporcionan una barrera física en la superficie del metal, evitando que el oxígeno se ponga en contacto directamente con el metal e inhibe las reacciones de oxidación.
Mejora la resistencia a la oxidación de alta temperatura: las superficies metálicas son propensas a la oxidación en entornos de alta temperatura (como espigas calientes). El tratamiento del revestimiento de cromo y el revestimiento de níquel puede mejorar la resistencia a la oxidación de la alta temperatura de los metales y evitar la corrosión metálica causada por el aumento de la temperatura.
3. Prevenir la corrosión
Resistencia a la corrosión del enchapado cromado: el cromo tiene una fuerte resistencia a la corrosión, especialmente en los ambientes de aire, húmedo y de agua. La capa de cromo puede evitar efectivamente la erosión de la humedad, los cloruros y otras sustancias corrosivas, evitando el daño a la superficie del metal debido a la corrosión.
El rendimiento anticorrosión del níquel: el níquel tiene una mejor resistencia a la corrosión que muchos otros metales, y tiene una buena resistencia a los productos químicos como el ácido, el álcali y el agua salada. Las espigas de metal de níquel pueden reducir en gran medida el riesgo de corrosión cuando se exponen al vapor de agua o a los productos químicos en entornos como cocinas y baños.
4. Mejorar la capacidad de resistir la humedad y el vapor de agua
Protección de humedad: los lugares con alta humedad, como cocinas y baños, son propensos a la corrosión del metal, especialmente las espigas de hierro y cobre. Los tratamientos de cromo y níquel pueden reducir efectivamente el daño directo de la humedad a los metales y prevenir la exacerbación de los procesos de corrosión.
Minerales en agua: los minerales en agua dura pueden adherirse a las superficies metálicas, y el contacto prolongado puede provocar corrosión y óxido de agua. Las superficies de cromo y níquel son suaves y tienen propiedades anti escala, lo que puede evitar efectivamente la deposición mineral y la corrosión en el agua.
5. Mejorar la resistencia química
Resistencia química: el uso diario de agentes de limpieza, jabón y otros productos químicos puede corroer las superficies metálicas, pero el cromo y el revestimiento de níquel pueden aumentar la resistencia del metal a estos productos químicos y evitar la corrosión química.
Resistencia a la corrosión alcalina ácida: las superficies metálicas en placas con cromo y níquel tienen una fuerte resistencia al ácido ácido, lo que puede resistir ciertos productos químicos ácidos y alcalinos que entran en contacto con ellos durante el proceso de limpieza, reduciendo los problemas de corrosión causados por ellos.
6. Aumente la resistencia UV
Protección UV: para las espigas al aire libre, la radiación UV puede causar daños a las superficies metálicas, lo que provoca corrosión o desvanecimiento. Las capas de cromo y níquel pueden evitar efectivamente el daño directo a los metales de los rayos ultravioleta y reducir el daño oxidativo causado por la exposición a la luz solar.
7. Retrasar el envejecimiento de los metales
Reduzca la tasa de envejecimiento: con el tiempo, los metales desprotegidos envejecerán gradualmente debido a la oxidación, la corrosión y las reacciones químicas, afectando su apariencia y función. El revestimiento de cromo y el revestimiento de níquel proporcionan protección a largo plazo, lo que hace que el metal sea menos propenso al envejecimiento y retrasando el declive de su vida útil.
8. Suave y fácil de limpiar la superficie
Reduzca la adhesión de la mancha: las superficies cromadas y níquelas son muy suaves, lo que dificulta que las manchas y la escala se adhieran a ellas. Incluso si hay suciedad en la superficie, es más fácil de limpiar y mantener, evitando la corrosión o la decoloración causada por una limpieza incorrecta.